Los dispensadores de agua, también conocidos como fuentes de agua, son dispositivos que proporcionan agua fresca ilimitada mediante el tratamiento del agua del grifo. Por esta razón, es crucial evaluar la calidad del agua de origen. En este artículo, exploraremos la situación del agua en Barcelona y cómo elegir una fuente de agua adecuada para instalar en la ciudad y sus alrededores.
Ósmosis: la elección ideal en Barcelona
En Barcelona, la calidad del agua es deficiente, y pocas personas consumen agua directamente del grifo. Muchas oficinas, empresas y áreas de atención al público en diversos establecimientos están equipadas con fuentes de agua purificada, ya sea a través de sistemas con garrafones o conectadas a la red. En el entorno empresarial barcelonés, las fuentes de ósmosis son comunes, ya que la filtración por sí sola no es suficiente para proporcionar agua de calidad. Sin embargo, en algunos casos, se utilizan fuentes de filtración con sistemas de enfriamiento, como las fuentes de acero inoxidable que suelen encontrarse en gimnasios y universidades.
Barcelona: agua con alta concentración de minerales
El agua que llega a Barcelona contiene una elevada cantidad de sales de calcio y magnesio, lo que la convierte en un agua muy dura. Aunque el agua dura puede generar inconvenientes en los hogares, también presenta desafíos al beberla. El sabor se ve afectado, y el aspecto del agua se vuelve más opaco.
El suministro de agua a Barcelona proviene de los ríos Ter y Llobregat. A lo largo de su recorrido, el agua pasa por varias plantas de depuración y potabilización que la transforman en agua potable. El agua del Llobregat se origina en montañas calcáreas, lo que contribuye a su dureza. Durante su trayecto, atraviesa áreas muy industrializadas como el Baix Llobregat y las minas de sal de Suria, donde también recoge una gran cantidad de sal. Esta agua dura y salina es la que llega a los hogares del sur de Barcelona. En cambio, en el norte, el agua del Ter tiene una calidad ligeramente mejor, aunque sigue siendo bastante dura.
Trihalometanos y otros contaminantes en el agua de Barcelona
Es importante destacar que el agua del grifo en España es segura para el consumo inmediato, gracias al tratamiento con cloro que elimina la mayoría de los organismos perjudiciales para la salud. No obstante, el agua puede contener partículas y contaminantes que podrían ser perjudiciales a largo plazo, como metales pesados (plomo, mercurio), hidrocarburos, nitratos, nitritos, pesticidas, entre otros. En este informe sobre el agua de Barcelona, se puede obtener información precisa sobre la presencia de cada elemento en el suministro de agua de la ciudad.
Entre los contaminantes más conocidos se encuentran los trihalometanos, que se sospecha que podrían causar cáncer con la exposición prolongada y que también están presentes en el agua de Barcelona. En algunos momentos, Barcelona ha superado el límite legal establecido por la Unión Europea para estos compuestos químicos, fijado en 150 microgramos por litro. Los trihalometanos se forman por la reacción del cloro con la materia orgánica, que en algunos casos proviene de la ganadería intensiva, especialmente porcina, que es relevante en Cataluña.
Aunque los organismos responsables del agua niegan que esté comprobado que los trihalometanos causen enfermedades, existen estudios que vinculan el consumo a largo plazo de agua con estos compuestos con la aparición de cáncer de vejiga.
El cloro en el agua: un aliado con sabor desagradable
El cloro, como se mencionó anteriormente, asegura la salubridad del agua. Este desinfectante se añade en las plantas de potabilización y se incorpora en forma de «cloro residual», que viaja con el agua hasta nuestros hogares. Su función es seguir desinfectando el agua en caso de nuevas contaminaciones.
Aunque el cloro es muy útil y no es perjudicial en pequeñas cantidades, afecta el sabor del agua. Las fuentes de filtración y ósmosis eliminan este cloro residual mediante un filtro de carbón activado. Al eliminarse el cloro en el último momento, este sistema garantiza que el agua sea lo más segura posible. Para asegurar completamente la salubridad del agua de las fuentes, es necesario un mantenimiento adecuado del dispositivo. En el caso de las fuentes que dispensan agua mineral embotellada, es más probable que se produzcan incidentes, como el ocurrido en Barcelona y Tarragona en 2016, ya que el agua de manantiales no se trata con cloro en ningún momento.
Barcelona: ¿Ósmosis o Filtración para las fuentes de agua?
Por todos los motivos mencionados anteriormente, en Aquaprof recomendamos instalar fuentes de ósmosis en las oficinas de Barcelona. Este sistema garantiza la eliminación del 99% de los elementos del agua, asegurando no solo un agua con buen sabor, sino también libre de elementos químicos indeseados, como los trihalometanos o los metales pesados.
Para saber más no dudes en pedirnos más información.
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